El método rítmico posee, al igual que la escena, vocación de interdisciplinariedad.
Experimentación con la música, el movimiento, y la voz.
Aprendizaje del dominio preciso y organizado del tiempo y el espacio.
Sensibilización auditiva, visual y kinética. Percepción y memoria en acción.
Activación de los procesos simbólicos (metafóricos y metonímicos)
Proyección y Presencia.